LOS ÁNGELES DE LA CABALÁH

Cabaláh proviene de la palabra hebrea Kabbalah, y se trata de un conjunto de tradiciones plenas de misticismo cuyo su origen es antiquísimo.
La noticia mas antigua que se conoce, data de los primeros siglos de la era cristiana y es una variante  del misticismo helénico astral que proyecta una versión del trono de Dios representada por el carro de fuego o Merkava, conducido por el profeta Ezequiel. Su doctrina se basa en dos libros de tradición hebrea: 
Sefer -Yetsirá (Libro de la Creación) y Sefer ha.Zohar (Libro del Esplendor) 
Según el Zohar, la divinidad es un flujo dinámico cuya fuerza esta compuesta por numerosos aspectos. Dios está mas allá y por encima de toda contemplación humana. El poder divino se irradia por medio de los diez sefirot (reinos o planos) que son las emanaciones de Ain Sof (infinito), para crear de este modo el cosmos. La comprensión del mundo se basa en la naturaleza e interacción de los diez sefirot cuyo símbolo es el árbol de la vida y divide al universo en cuatro mundos:

a) El Arquetípico, el Fuego, el mundo de Dios
b) El Creativo, el Agua, el mundo de los arcángeles.
c) El Formativo, el Aire, el mundo de los ángeles
d) El Material, la Tierra, el mundo de los elementales.

Cada uno de los sefirot indica acciones de la divinidad, y acciones que el hombre debe efectuar para llegar a ella. Cada uno de los primeros nueve tiene asignado un astro celeste, y el décimo, Malkut, la esfera de los elementos Fuego, Agua, Aire y Tierra. 
De este modo se ve que los arcángeles están en una esfera creativa, y los ángeles en una formativa  y si bien se reconoce a Miguel, Rafael, Gabriel y Uriel como arcángeles, se les atribuyen funciones diferentes, se les otorga un elemento y se les asignan astros celestes:

Miguel, Fuego, Marte Jupiter Plutón
Rafael, Aire, Mercurio
Gabriel, Agua, Luna
Uriel, Tierra, Sol

Esta idea tiene cierto contacto con la creencia de Santo Tomás de Aquino, que aseguraba que cada astro celeste tiene su ángel, quien le guía por su órbita exacta y calculada.
Actualmente se buscan los puntos similares de las diversas creencias, bajo la idea de que todas son posibles revelaciones de la Divinidad Única.
Según la Cabaláh, Uriel fue quien transmitió el conocimiento de la Alquimia Natural de la Humanidad, vive en el Sol y está relacionado con la Abundancia, la Salud, el encuentro con el Amor de pareja

y la Revelación de la Conciencia Divina.