sábado, 22 de septiembre de 2012

De mis apuntes: Pequeños sucesos SENTIRSE VÍCTIMA



Cuantas veces, consciente o inconscientemente, nos vemos como víctimas, de una situación, o de alguna persona, puede ser como hijos, como padres, como empleados. De cosas que han sucedido hace ya tiempo y que aún a la distancia no olvidamos, no queremos olvidar. Pero como, como no querer olvidar, si me hace daño. Es que en nuestro subconsciente 
hemos determinado, decretado ese estado, y ahí estamos, relamiendo esas heridas constantemente, sin dejarlas sanar. Sentirse víctima es no permitirse ver la realidad tal como es, poner las culpas afuera, en el otro, o en las circunstancias, de ese modo jamás tendré que hacerme cargo, la culpa es del otro, que puedo yo hacer? Es esa falta de madures, el miedo a enfrentar la vida por mi mismo? Que lo que hace a una persona culpar a otros y no asumir que uno mismo puede estar equivocado. 
Cuando éramos chicos culpábamos a otros para no sufrir un castigo, era más fácil decir me caí porque me empujó, que asumir que fui yo quien no vio la piedra, y seguimos así por la vida justificando nuestros errores o falta de atención, culpando al entorno, y es seguro que siempre encontraremos un culpable para atenuar y justificar el error, la falta de atención. Encontramos más fácil decir, él tiene la culpa, que asumir que algo tengo que cambiar.
Tiene sentido culpar al afuera? Me hace sentir bien? Me conformo con eso? Como evoluciono, como crezco si no reconozco mis debilidades. Y de eso se trata, de evolución, que respuestas o que bienestar encuentro en la vida, haciendo que los demás se sientan culpables. Y si de todos modos puedo ver que los demás avanzan, mientras yo me quedo en el mismo espacio, doloroso, de víctima, de aquel que no cambia nada porque jamás asume que puede cambiar. 
En la psicología espiritual, se busca abrir la mente de esa persona, con el único fin de mostrarle que tan maravilloso es el pensamiento libre. Darme cuenta que a cada instante, con cada actitud, con cada pensamiento, construyo mi vida, que lo que creí ayer es mi presente y lo que creo hoy es mi futuro, construyo a cada paso haciéndome cargo y que de mi, solo de mi, depende lo que pasa, y cuando abro los ojos y lo veo, puedo sonreír satisfecha de mis acciones, porque esas sí son mías, producto de lo que cree y creí. Y que si yo siento que puedo ser libre lo seré y como dijo el poeta: ..”seguiré adelante sin que acuda tu recuerdo, solo para alentarme si la duda quiebra mi voluntad de acero”…





Maria josefina Masto- Reiki Master, coordinadora de talleres de alta capacitación en psicología espiritual y autoconocimiento
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Dejame aquí tu comentario.responderé a la brevedad.Un beso:María